viernes, 26 de septiembre de 2008

tengo cuatro mecheros rojos en el bolso, pero no me queda tabaco



hacía dos meses que
no conducía.
Me gustó acelerar un poquito
y bajar la ventanilla del todo.
Quiero dorarme los brazos,
y enterrar las ojeras bajo una encina.

Hacía dos meses que
no me emborrachaba con B.
No quiero estar tan lejos de ella,
y que pasen tantas cosas
entre reencuentro y reencuentro.
Me gusta que nunca me diga que no a la última,
y se siga pintando los ojos en el baño
aunque ya no quede nadie más en el bar.


hacía dos meses que
no me ponía muy triste
pensando: 'todo está cambiando demasiado'.
Aún me queda una semana
pero ya siento fatiga
pensando en maletas
y despedidas.

Es curioso que en Madrid
el equilibrio me marea,
y que en casa
no me permito la menor alteración.
Mis amigos, mi habitación.
Los sonidos,
el color de las tardes.
La madrugada,
con ese olor a panaderías.

Los puntos de referencia,
deben guarecerse en lugares seguros,
superficies estables.

Yo no me ato a un puente maleable
cuando se acerca una tormenta.

Siempre tuve claro
las manos a las que me podría agarrar
en plena apocalipsis.

a pesar de mis momentos raros
en los que merezco un bofetón
por chunga e impertinente.

16 comentarios:

Carol Blenk dijo...

"Yo no me ato a un puente maleable
cuando se acerca una tormenta."

Qué bien escribes, tipa grande.
Me gustaría pasar por tu pueblo y llevarte a tomar una copilla por ahí, y fumarnos unos cuantos pitis hasta que caiga la tarde.

Rebesos, guapa!

carmen dijo...

Todo está cambiando demasiado, pero no vale ponerse triste más de dos días seguidos. Ves? He rebajado de lo que me decías tú... XX

38 grados dijo...

No sé si hará como unos dos meses que no te visitaba y me gusta leer a esa Carmen quizás chunga e impertinente, pero indiscutiblemente tú.
Y por mí, no cambies.

Pi dijo...

Reina, yo, como 38, hacía mogollón que no me pasaba por aquí, y, como siempre, te digo qué lindo escribes. Todo a su medida, por favor, que eres linda cuando estás triste, feliz, cuando hablas de tu mundo, esas cositas, ya sabes.
un abrazo!

hans k dijo...

no es bueno ponerse triste antes de tiempo. si para algo sobra el tiempo, es para la tristeza. siempre debería durar menos, ser repentino e irse al poco, como el wasabi.

Clara dijo...

No sabía que andabas por Madrid. La vi en los Ideal por eso he corrido a seguirte el rastro. Un besote, guapa

Clara dijo...
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Isthar dijo...

Cuando todo cambia el suelo parece menos estable de lo que solía ser. Es sólo el cambio de perspectiva, el abismo de posibilidades sin garantía, la sensación de vértigo en el estómago cruzando los dedos por saltar sobre seguro.

No pierdas las manos y los lazos, las noches cercanas, los reencuentros y encuentros. A veces, todo lo que necesitamos, es saber que esas manos están ahí, para abrazarnos, y para darnos cuantas collejas consideren oportunas, que para eso están las personas que nos quieren.

Besos de caracola, pequeña Carmen

mgab. dijo...

'Los puntos de referencia,
deben guarecerse en lugares seguros,
superficies estables'
¡qué razón tienes, Carmen, esta frase es toda una sabiduría condensada! saber donde están las agarraderas es fundamental.

acabo de leer en otro sitio un cierto elogio a la rutina, y también estoy de acuerdo con eso: a veces (pero sólo a veces, eh) la rutina es una buena muleta para aguantar un temporal, un bache pasajero...

manuel_h dijo...

¿otra maleta?
¡no paras!!

begusa dijo...

está bien aprender a estar bajo las tormentas... en silencio... pero con pie firme...
a veces no viene mal atreverse a negarse todas las manos... nos ayuda a romper barreras y ensanchar límites...
saludos y pétalos

Anónimo dijo...

qué palabras más "grandes"! :D

Carmen dijo...

Carol Blenk bueno, ahora ya estoy en Madrid, aquí también tenemos pendiente una visita, no? y los pitis que tú quieras ;) muchas gracias, Carol, de verdad. Un beso grande

carmen eso es que vas caminando segura de ti misma, y que has crecido con el cambio, no te has hecho más pequeña ;) qué bien, qué bien, guapísima

38 grados :))) jo, muchas gracias. Me alegra que te sigue pasearte por aquí. Un besote

Carmen dijo...

Pi sois unos aduladores!! jeje no en serio, muchas gracias, es un lujo que me lea gente como vosotros. Todo a su medida, por favir. Claro, así es. UN beso grande guapísima

hans k la tristeza es necesaria, yo lo creo. Pero es cierto eso que dices, destaría bien que durara menos. Yo hace tiempo que me prohibí pasar más de 3 días de luto. No nos sobra el tiempo para ser feliz, no crees?

Clara sí, bueno, a ti ya te conté cuanto quería contarte (de momento) ;) Un beso grande, chula

Carmen dijo...

Isthar a veces el suelo realmente se vuelve inestable, sino no explico cuanto tropiezo :) pero si duele o marea, significa que estamos vivas, no? eso me lo enseñó alguien... no podría imaginarme la vida sin esos pares de manos. Los que te salvan de un sólo roce, los que te remenean, para que despiertes y dejes de meter la pata. Besos inmensos, mujer morena

Jin yo soy muy de cambios, muy de remover muebles, cambiar las cortinas o la ciudad... pero tengo muy claro los puntos de referencia, Las agarraderas, eso es... sí, la rutina viene bien según en qué momento, estoy de acuerdo contigo. un abrazo guapa

manuel_h jejeje ayyyy si tú supieras... besote

Carmen dijo...

begusa, yo sufrí mucho golpe por aguantar de pie, orgullosa y sola, la tormenta. Ahora me lo pienso antes, y no me guardo las ganas de pedir un abrazo, que me ayude a continuar. No es de cobardes. Hay que saber crecer también pidiendo ayuda. Un beso, y esta lluvia primera

enara gracias :))